Anthony Daniels actuó en las seis películas de la Guerra de las Galaxias en el papel de C-3PO, el quisquilloso robot plateado de la saga. A él le tocó decir la primera línea de la película original, la cual está de aniversario.

Daniels habló con la BBC sobre el recuerdo más perdurable que tiene de aquella época y de cómo todavía es, en gran medida, una parte del universo de la Guerra de las Galaxias. "Por un breve instante yo fui verdaderamente un Dios", señaló, calificando la saga como "una buena historia, tremendamente bien contada".

Daniels recordó que "estuve trabajando en el traje de C-3PO durante seis meses, yendo a Túnez, sin dormir, quedándome exhausto".

Continúa esta anécdota añadiendo que "estaba despierto hasta después de medianoche para terminar el disfraz, estaba en el sitio a las 5 en punto y entonces, olvídate del glamour de Hollywood, tenía una tienda de campaña con suelo de arena y seis personas dedicando dos horas para ponerme el disfraz".

"Cuando finalmente me lo pusieron, encendieron la luz y abrieron la tienda, yo salí, y por un breve instante, para todo el equipo repartido en el desierto enfrente de mí, yo fui verdaderamente un Dios", señala mientras recuerda la escena. "El sol de la mañana le daba a ese disfraz y todos quedaron simplemente boquiabiertos", comentó.

"Ese fue mi momento de fama", señaló conforme.